28/06/2020

We Become What We Behold


No hay duda de que los videojuegos se han consolidado como una forma más de ocio durante las últimas décadas: basta con advertir el peso que tiene la industria videolúdica en el mercado y en la cultura popular, así como la creciente oferta de títulos de múltiples géneros y estilos.

A pesar de ello, hay aspectos que en general brillan por su ausencia. Así, cuestiones relativas al aprendizaje o a la sabiduría resultan muy difíciles de encontrar, y cuando esto ocurre no se suelen plasmar de una manera atractiva. Por fortuna, dentro de este campo también existen las excepciones; en este caso, una creación que alienta el sentido crítico hacia los grandes medios de comunicación: We Become What We Behold.

Justo antes de comenzar el juego, se da un aviso sobre su contenido violento (que parece que está incluido con el principal objetivo de concienciar), y en el momento en que empieza la partida aparece una cita erróneamente atribuida a Marshall McLuhan que encierra gran parte de la esencia del juego: «We shape our tools and then our tools shape us»; es decir, "moldeamos nuestras herramientas y nuestras herramientas nos moldean a nosotros". A continuación el jugador divisará a vista de pájaro una multitud de personajes deambulando y se encargará de hacer fotografías de todo aquello que pueda considerarse digno de aparecer en la pantalla de televisión que todos ellos ven. Las cosas se irán poniendo más "interesantes" conforme los personajes reaccionen a las imágenes (acompañadas de un titular que las interpreta) que se les van a mostrar en dicha televisión.

Debido a su brevísima duración, el título presenta un desarrollo ágil y directo. De manera clara y mediante ingeniosas dosis de humor negro, refleja la influencia que los mass media generan en la gente hasta sus últimas consecuencias.

Desarrollado por Nicky Case, se puede jugar gratuitamente en https://ncase.itch.io/wbwwb, y seguro que no deja indiferente a quien lo tenga delante.

23/03/2020

Ficción real y realidad ficticia

Una figura televisiva de renombre realiza un programa en el que hace sentir a la audiencia más cerca de la cárcel de lo que cree, y en efecto, semanas más tarde, hay que acabar por darle la razón.

Mientras tanto, un espectáculo real se vuelve tan efectivo que su competencia directa, la mayoría de teatros y cines del mundo, se ve obligada a cerrar sus puertas temporalmente.

05/12/2019

La polvorienta rueda del roedor

Es cada vez más frecuente, en lo que se refiere a sistemas políticos y elecciones, asistir a un replanteamiento de esta maquinaria y su funcionamiento por parte de un considerable sector de la población. No es para menos, en vista de las sempiternas promesas incumplidas y del despilfarro sistemático ligado a sus actividades e instituciones, que a estas alturas apenas pasan inadvertidos.

No obstante, para distraer de estos errores el sistema pone en marcha determinadas estrategias como la adoptada en ciertas democracias occidentales recientemente, consistente en la creación de nuevos partidos que se aúpan debidamente desde sus lacayos medios de comunicación. Así, la sensación de renovación en el panorama político se infunde en parte del público para conferirle esperanzas renovadas.

Pues bien, nos parece que tanto las opciones tradicionales como las recién salidas del horno democrático llevan la impronta del sistema que las maneja a todas a voluntad. Creemos que el paradigma izquierda-derecha, bajo el que se superponen todos estos movimientos, está erigido con el principio de crear discordia entre la gente, y desde la observación y la experiencia, parece inevitable no pensar en él como un callejón del que resulta imposible escapar.

Pero, en ese caso, ¿no quedaría ninguna salida? Si se da por válido todo lo dicho hasta aquí, podría cobrar sentido la vía de la abstención. Sin embargo, esta elección es tan hija del sistema como cualquier otra, pues si bien se suele desaconsejar unánimemente desde el poder, no se encuentra en absoluto condenada ni perseguida (exceptuando llamativos casos como el de Argentina).

A pesar de lo expuesto, compartimos la idea de que dar un voto implica legitimar el mecanismo dominante, pero por otra parte, no votar no tendría por qué propiciar necesariamente un paso adelante hacia su final. Dicho de otro modo: que un hámster se haya cansado de corretear en la rueda no significa que haya logrado salir de su jaula.

¿Serán los brazos del poder, aquellos cuyos voceros imploran la movilización al voto, los mismos que en el fondo desean que no se vote o, directamente, les es indiferente?

No estamos en condiciones de determinar que el sistema se pueda o no cambiar. De todos modos, si así fuera, seguramente tendría que darse un aumento de la consciencia colectivo complicadísimo de llevar a cabo en la práctica.

Por lo tanto, si en el exterior abunda la impotencia y la indefensión, no hay disponible una opción mejor que cultivar y mejorar nuestro interior y que solo así pueda redundar hacia fuera. Al fin y al cabo, cada ser humano es también un sistema regido por un funcionamiento que debería conocer y manejar con relativa autonomía puesto que, este sí, se halla a su alcance.

25/09/2019

Cádiz nunca estuvo tan lejos

Se dice que tiempo atrás hubo un investigador dotado de una sólida formación y de una intuición agudísima que destacaba del resto en muchos aspectos.

Tanto la cantidad como la calidad de su producción se consideraban notablemente superiores a las de otros colegas. No era de extrañar que una selecta minoría de sus contemporáneos lo valorasen, sin vacilar, como a un genio. Su creación multidisciplinar aumentaba con el paso de los días, y aportaba un saber intuitivo de originalidad inusitada.

Un día, de repente, su obra dejó de encontrarse disponible para el público. De su labor solo quedó la fragmentación del material, repartida a partes desiguales por y para sus prevenidos seguidores, quienes acudían a la red para obtener su ración como quien se reparte un inmenso tesoro: ¿sacralización de la víctima metafóricamente inmolada?

En todo caso, lo que está claro es que al final su proyecto se truncó antes de tiempo y se disolvió sin alcanzar el siguiente nivel que había dictado su voluntad, sin generar una simbiosis en cualquier playa gaditana.

24/04/2019

Verdoso


Mantén la llama

que vibra en lo interior;

esencia pura.

23/04/2019

Love Masacre: acordes con mensaje


Sus canciones ayudan a catapultar toda esa información que a menudo se oculta o se tergiversa en los medios de comunicación. Y es que, oriundo de Bilbao, este quinteto de punk se encarga de dar voz a varios asuntos e inquietudes propios de la información alternativa que busca desentrañar la verdad oculta de las cosas.

Sus primeras piezas, recogidas en un álbum homónimo de 2018, tratan preocupaciones poco comunes en la escena musical tales como la manipulación del clima o la eugenesia. Actualmente cuentan con un segundo álbum, De pederastas y más mierda (2019), que continúa con la línea reivindicativa con la que comenzaron su andadura, sumando cuestiones de interés al abanico temático de sus letras.

El trabajo de Love Masacre puede escucharse y descargarse libremente en lovemasacre.bandcamp.com. Por otro lado, su obra también está presente en YouTube con grabaciones de estudio y algún que otro directo.

17/03/2019

Thaumetopoea pityocampa


Me suponéis un serio dilema moral.

Antes, hace bastante tiempo, os pisaba hasta dejaros sin vida a algunas de vosotras por aquello de que causáis un enorme perjuicio a los pinos que os circundan. A otras os "dejaba vivir" sin más, igual que cualquier entidad situada por encima del bien y del mal, a cargo de la justicia divina. En consecuencia, vuestra peculiar cohorte se veía visiblemente mermada y destruida.

Actualmente, no os inflijo daño consciente, pues no me siento con la suficiente autoridad para llevar a cabo semejante acción. Sí, sé que resultáis perjudiciales y si os llegáis a reunir muchos ejemplares podríais llegar a defoliar gran cantidad de árboles -seres a los que, por otra parte, venero-, pero por ahora (pues continuamente hay que revisarlo y cuestionarlo todo) no tengo ganas de ser el verdugo de una especie ajena a la destrucción que provoca. Vosotras no sabéis que dañáis, pero yo sí me doy cuenta de que os daño.

Innumerables veces recuerdo, al veros, el fragmento de la mordaz comparación que Luis Martín-Santos estableció entre vosotras y algunos de los personajes de su magnífica Tiempo de silencio. En fin, en vuestro caso se trata de vuestra ley de vida: es natural que la procesionaria desfile sin cuestionarse nada, más allá de sentirse unida a un igual por delante o por detrás. Lo que ya se torna más risible es que a esto se unan algunos seres humanos, especialmente durante ciertas épocas del año...

11/03/2019

11M

I feel dizzy, I feel ill
I think I should have had
a relaxing drink.

The more I run,
the less I get closer.
Nothing better than a loud bomb
could take down our forces.

More and more often
we get extinct content.
We seem to live our lives
surrounded by kind of an isle.

One of those where waves are like holograms,
and birds perch on plastic wastes.
Where are the trees?
Where are those trains?